EN EL ÚLTIMO SEMESTRE

180 niños y niñas habitantes de uno de los barrios más humildes de nuestra ciudad han tenido la posibilidad de recibir un almuerzo diario durante lo corrido de este año, gracias a su valiosa colaboración cristalizada en cada uno de sus puntuales aportes; Adicionalmente algunos de ellos han podido acceder al programa Aprender Soñando, que les brinda formación desde una mirada del desarrollo psicosocial a través de talleres de artes plásticas y teatro con un acompañamiento semanal para el desarrollo de habilidades y competencias lógico-matemáticas y del lenguaje que colabore a mejorar su nivel académico.

Durante este año hemos tenido también la posibilidad de iniciar un trabajo con la población juvenil del sector, teniendo como resultado la participación en el proyecto 117 de la Alcaldía Local de Usme a través del cual 50 jóvenes tuvieron la experiencia de acercarse a diferentes actividades que aportaron a sus conocimientos, habilidades y desarrollo de potencialidades en torno al trabajo en equipo, el trato fraterno con otros y el fortalecimiento de un espíritu de liderazgo que promueva nuevas formas de ver y comprender el mundo. En este sentido tenemos también que uno de los objetivos fuertes de este proceso fue el trabajo en torno a la construcción positiva del autoconcepto y la autoestima en el marco del desarrollo psicosocial que es una de las prioridades de la fundación.

No es necesario decir que cada uno de los pasos que damos para la construcción de un mundo diferente en los rincones más necesitados, no sería posible sin su ayuda, sin su valiosa colaboración y la enorme disposición que han demostrado desde la generosidad a la hora de servir y ayudar.

Mil gracias por estar y acompañar este proceso, miles de bendiciones…